Vive el Momento: Donde la Vida Realmente Sucede
por pazinteriorya1@gmail.com | 28 de octubre de 2025 | Categoría: Presencia y Conciencia
Vive el momento. No como un mandato, sino como un regalo. Porque la vida no está en los planes futuros ni en los recuerdos pasados. Está aquí: en el verde que te rodea, en el agua que cae, en el olor de la tierra mojada después de la lluvia.
El cuerpo sabe lo que la mente olvida
Tu mente está en el trabajo, en las deudas, en lo que dirán. Pero tu cuerpo está aquí, ahora. Tus pies sienten el suelo. Tus pulmones respiran el aire. Tus ojos ven el verde. Tu piel siente la brisa. La presencia no es una técnica. Es recordar que ya estás aquí.
Y en ese “ya”, está toda la vida.
Los cinco sentidos como puerta a la paz
No necesitas meditar en una montaña para estar presente. Solo necesitas abrir tus sentidos al mundo que ya te abraza:
- Mira: Observa el verde de las hojas, no como fondo, sino como protagonista. Nota sus matices, sus sombras, su movimiento.
- Escucha: El agua que cae no es ruido. Es ritmo. Es canción. Es el latido del mundo.
- Huele: La tierra húmeda no es olor. Es memoria. Es raíz. Es pertenencia.
- Toca: La corteza de un árbol, la hierba fresca, la lluvia en tu piel. El tacto te ancla en el ahora.
- Siente: No pienses. Solo siente. La calma, la humedad, el frescor, la quietud.
Lo sencillo no es poco. Es todo.
En un mundo que celebra lo complejo, lo rápido, lo espectacular, hemos olvidado que la verdadera riqueza está en lo sencillo: un rayo de sol, una taza de té caliente, el silencio compartido con alguien que amas, el canto de un pájaro al amanecer.
Disfrutar lo sencillo no es conformismo. Es lucidez. Porque en lo sencillo, no hay distracciones. Solo hay vida.
Cómo practicar la presencia sensorial (sin esfuerzo)
No necesitas tiempo extra. Solo necesitas cambiar tu atención. Aquí un ritual para el día a día:
El “Minuto de los Sentidos”
En cualquier momento del día —al caminar, al tomar café, al abrir la ventana— detente un minuto y:
- Mira algo verde.
- Escucha un sonido natural.
- Huele el aire.
- Toca algo real (no una pantalla).
- Respira y di: “Estoy aquí.”
Conclusión: Eso es vivir
Vivir no es acumular experiencias. Es estar plenamente en cada una. No es correr hacia el futuro. Es detenerse en el presente. Porque la vida no es un destino. Es un acto de atención.
Hoy, sal. Mira el verde. Escucha el agua. Huele la tierra. Y en ese instante, sin hacer nada más, estarás viviendo de verdad.
“Disfruta lo sencillo. Porque eso no es solo vivir. Es vivir con alma.”